El esperado clásico tuvo un sabor amargo para los parisinos que viajaron más de 650km para enfrentar a su némesis, los marselleses. Fue el primer clásico francés para Javier Pastore, en un entorno difícil, con un estadio repleto de hinchas del OM (la capacidad es de 60 000) ya que los parisinos no estuvieron autorizados a presenciar el encuentro por razones de seguridad.
Los goles fueron de Rémy en el minuto 9, Amalfitano en el 66 y cerró Ayew a los 83. Fue la primera derrota del PSG como visitante en este torneo. Las estadísticas muestran que el PSG tuvo más pelotas jugadas y poseyó el balón igual que el OM, sin embargo nunca pudo marcar.
El Flaco tuvo una buena presencia y fue el objeto de varias faltas, dada la fuerte marca que los marselleses le dedicaron. Hizo más de 29 pases claves en los ataques pero ninguno pudo terminar en gol. En el minuto 59 el director técnico del PSG, Antoine Kombouaré decidió cambiar la dupla de ataque Pastore-Gameiro y El Flaco cedió su lugar a Bodmer, mientras que Gameiro lo hizo por Erding. El cambio no dio los resultados esperados y los parisinos no lograron convertir.
La decepción fue grande en París, pero la esperanza se mantiene. Todavia faltan muchos partidos.
El próximo encuentro será también de visitante pero esta vez contra el Salzburg en Austria, por la Liga Europea. El pasado 15 de septiembre, el PSG lo había vencido 3-1 de local.
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