El estadio delira con la presencia del cordobés que no para brindar alegría. Desde que pisa el campo la mirada de los hinchas se posan sobre Pastore para ver sus pases y su magia.
Los primeros 45 minutos fueron una fiesta “Pastoriana”. El Flaco no paró de crear situaciones de gol. En el minuto 15, 20, 22, 24, 26 y justo antes que termine el primer tiempo, Pastore hizo temblar a los once de Nice. Ni siquiera el también argentino Fabián Monzón, que lo seguía por todos lados, pudo controlarlo. A los 36 minutos Nenê convirtió un penal que sería el primero de tres en toda la noche. Los parisinos pudieron ir al receso tranquilos. El partido estaba 1-0 arriba.
A pesar de la victoria Pastore no les permitió a los de Nice que descansaran en el segundo tiempo. Sin embargo un error de la defensa del PSG dio un penal que el rival no desaprovechó, empatando 1-1. La alegría les iba a durar gracias a Pastore que lideró el contraataque despiadado.
Cada movimiento de El Flaco ponía la pelota justo donde la necesitaban los delanteros del PSG. En uno de esos ataques, el defensor Abriel de Nice, solo pudo detener al cordobés usando su mano. Nuevo penal para PSG, y esta vez fue Gameiro que no perdonó: 2-1 y así se iba a quedar el resultado hasta el final del encuentro.
Pastore había cumplido su rol y en el minuto 93 su director técnico, Antoine Kombouaré, le dio su merecido reposo. La tribuna aplaudió enloquecida la partida de su ídolo.
Los parisinos tendrán apenas dos días para descansar hasta el nuevo encuentro, este sábado contra Montpellier (al sur de Francia sobre el mar Mediterráneo), uno de los líderes de una Liga que se pone cada día más interesante.
Tiembla el sur, llega Pastore.
Javier est le "porte-bonheur" de l'équipe...depuis qu'il joue, aucune défaite, des exploits individuels et des buts ;-)
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